"...hasta la última explosión nuclear que suceda en la tierra, será lumínica y en esa luz, aunque negra, habrá poesía"

- Una pregunta que se me antoja obligada: a lo largo de su dilatada trayectoria poética, con más de veinte títulos publicados y premios de toda condición y cuantía, traducida incluso a los idiomas más inverosímiles y antologada razonablemente, ¿qué ha dejado Dolors Alberola nel mezzo del cammin, qué ha ganado, qué espera?      
- No me hagas reír, antologada… por Dios y premiada… robada tantas veces –lo digo sin orgullo, sólo con veracidad, aunque no lo parezca. Este mundo literario nuestro está manchado por la misma bestia que el que lo envuelve, la realidad es mucho más oscura que este libro. Además, por qué no entenderlo, en vez de sobre o acerca de la oscuridad, encima de ella, pero no por poder sino por escapar, por vivir en el sueño, de ahí que mis editores, inteligentemente hayan colocado tantos manantiales de luz en las ilustraciones. Qué he dejado en mitad del camino, mi fuerza de soñar, aunque todavía no me he rendido, pero ha decrecido en proporción a la suciedad que me ha ido envolviendo en ese territorio de nieblas literario. Qué he ganado, felicidad, mucha felicidad mientras invento mis mundos y ellos me van inventando nueva. Qué espero, que algún día la inteligencia sirva para algo y la gente se dé cuenta de que ningunear o dejar de lado a quien maneja la sombra y la reparte es una solemne idiotez y que poeta no es el que medra ni el que compra ni el que trepa ni el que se abre de piernas o de nalgas, poeta es quien lo es y eso no está dado a todos y que aún desde debajo de las piedras se sigue viendo la luz del Prometeo que la lleva.    
- Vivimos, literariamente hablando, una etapa de relevo generacional, ¿hay futuro para la poesía?, ¿quizá va a cambiar tanto, que no la reconocerá ni la madre que la parió    
- La poesía no se deja matar por el imbécil de turno –dicho metafóricamente-. Si bien ya se dijo aquello de podrá no haber poetas… pero siempre habrá poesía, podríamos modernizarlo aseverando que hasta la última explosión nuclear que suceda en la tierra, será lumínica y en esa luz, aunque negra, habrá poesía.    
Lo que quizás me preguntas y debo darte la razón, es que cambiará de rostro, al tiempo que mantendrá el suyo y es posible que muchísimas veces no la reconozca ni su propia madre.    
- Tres razones, tres, para recomendar la lectura de Sobre la oscuridad  
- Aconsejo que se lea y luego cada uno se cuente las razones. Yo no soy quién para descubrir el pastel.